Ubicación geográfica inmejorable: a 37min de Barcelona y 3h 30min de Madrid
Girona está perfectamente conectada con el resto de España y con Europa. A 100 km de Barcelona, a 60 km de la frontera francesa y a tan sólo 30 km de la Costa Brava, Girona disfruta de una ubicación geográfica inmejorable. Las redes aérea, ferroviaria y viaria permiten a la ciudad estar perfectamente comunicada, sin sufrir los excesos de otras ciudades con más densidad de población, pero con las mismas ventajas. La llegada del TAV completa la conexión en alta velocidad con Barcelona en 37 min, con Madrid en 3h 30min y Paris en 5h 30min.

200km de costa, al pie de los Pirineos
Girona se encuentra entre mar y montaña y es la capital de la provincia, que ofrece un gran contraste de paisajes. La Costa Brava, a tan sólo 30 minutos de la ciudad esconde auténticos pueblos de pescadores, calas con aguas cristalinas y parques naturales. A poco más de una hora de camino están Los Pirineos, con un legado histórico único de ermitas, conventos e iglesias y algunas de las mejores estaciones de esquí de España.

Ciudad histórica milenaria
Pasear por Girona es un descubrimiento continuo de pequeños y grandes rincones dónde perderse. El Barrio Judío conserva aún la magia de las callejuelas estrechas y cruzadas en el Barrio Viejo de la ciudad, con lugares llenos de historia como las Casas del Onyar, La Basílica de Sant Fèlix, la Muralla, los Baños Árabes, el monasterio románico de Sant Pere de Galligants o La Catedral (XIV-XVII), una construcción espectacular con la nave gótica más ancha del mundo.

Gastronomía única
La provincia de Girona es una de las zonas gastronómicas más importantes del mundo con un gran dinamismo culinario. Cerca de 20 estrellas Michelin se encuentran repartidas por la región. Por su posición geográfica, dispone de una gran variedad de productos frescos y de calidad, procedentes del mar y de la montaña. Algunos de los restaurantes más prestigiosos del mundo están ubicados en la ciudad, como El Celler de Can Roca con tres estrellas Michelin o el Restaurante Massana, con una. Otro referente gastronómico es El Bulli de Ferran Adrià, que actualmente ha cerrado sus puertas para convertirse en una fundación.